Justo
después de escribir Aventuras de un guionista en Hollywood, cuando ya había ganado dos premios oscar como guionista y
había tenido numerosos éxitos de taquilla, William Goldman estuvo
cinco años sin que le ofrecieran ningún trabajo, pasando a
convertirse poco menos que en un leproso social. Quizá porque, como
decía en Aventuras, nadie sabe nada. O por el declive de la
industria. O, sencillamente, por mala suerte. Pero si alguna vez se
necesita recurrir a un ejemplo de desperdicio de talento, he aquí un
buen caso.
En los veinte años que pasaron entre
la publicación de su primer libro sobre el cine americano y estas
Nuevas aventuras de un guionista en Hollywood, Goldman pasó por este
periodo de sequía, volvió a introducirse en el despiadado y
deslumbrante mundo de las películas, sufrió y disfrutó con los
vaivenes de su carrera, estrenó la que seguramente sea la película
por la que más será recordado, La princesa prometida, y acumuló
material para deleitarnos con una nueva entrega de sus experiencias.
No queda muy claro si Nuevas aventuras
es un libro para aprendices de guionistas disfrazado de memorias o si
se trata de una autobiografía disimulada tras algunos recursos para
escritores. En cualquier caso, por muy dispares que parezcan ambos
géneros, Goldman se las arregla para que no haya contradicción,
para que las anécdotas y los trucos del oficio se entremezclen en
perfecto equilibrio y naturalidad, de tal manera que si en la primera
parte se centra en alguna de las películas en la que participó
durante esos años introduciendo importantes consejos, al final
ofrecerá un original inédito para que el propio lector saque sus
propias conclusiones.
Así, el interesado en aprender algunas
útiles herramientas para la escritura de guiones no saldrá
decepcionado, y aunque, un poco a regañadientes, Goldman admite que
su método no es el único válido, algunos de sus principios
deberían inscribirse con letras de oro entre las reglas que todo
buen guionista debería seguir. Pero, por otra parte, el libro puede
ser disfrutado por cualquier aficionado sin intenciones
profesionales: entre historias de Hollywood y vivencias personales
siempre retratadas con humor, Goldman demuestra una vez más que es
un escritor del que se puede tanto aprender como disfrutar.
Editorial
Bloomsbury
Edición es
español de Plot
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