Siguiendo el
consejo de Ursula K. Le Guin, habíamos decidido no volver a leer
ningún libro sobre una familia disfuncional que se reúne para
celebrar una fiesta señalada y de paso restañar sus heridas. Pero
claro, Le Guin, y nosotros con ella, se refería a esas novelas
protagonizadas por un profesor de escritura creativa de la
Universidad de Michigan que vuelve a St. Louis para celebrar Acción
de Gracias, y lo que se encuentra el lector de Una madre es a una
familia que conoce de toda la vida, incluso íntimamente.
Lo primero que
se agradece del libro de Alejandro Palomas es que, a pesar de su
contenido dramático, a veces incluso patético, se impone un sentido
del humor, que hace reír tan a menudo al lector como a su narrador.
Contada, la historia de Una madre puede parecer una de esas
sucesiones de desgracias que hacen mirar al cielo con el puño en
alto, pero el autor se toma los reveses del destino con filosofía:
llorar lo que sea necesario, pero solo para después poder afrontar
lo que venga con fuerzas e ilusión.
En muchos
aspectos, la novela de Palomas se podría leer como el reverso
luminoso de Reunión en el restaurante Nostalgia, de Anne Tyler. un
compendio de personajes maltratados por la mala suerte (y las malas
compañías), que se reúne sin demasiadas ganas y menos
perspectivas, pero que de alguna manera se las arreglan para
continuar adelante. Por supuesto (el título no engaña), la madre se
sitúa en el centro de todas las historias y, a su manera despistada
y surrealista, consigue resolver todos los problemas gracias a su
bondad y profunda sabiduría.
Además de un
antológico personaje central y del retrato cariñoso (y también con
su pizca de malevolencia) de una familia cualquiera, Palomas añade
un hábil uso de los tiempos narrativos, evitando la linealidad y, sin
recurrir a los trucos melodramáticos, dotando de carne y de
melancolía de la buena a una historia que cualquiera puede hacer
suya. Hemos llegado casi al final, pero no nos resistimos a utilizar
la palabra: Una madre es una novela catárquica.
Editorial
Siruela
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